Los expatriados en Francia se benefician de un sistema de salud universal de alta calidad. Muchos optan por completar esta cobertura con un seguro complementario privado para beneficiarse de una cobertura más amplia de sus gastos sanitarios, incluida la atención especializada y dental.
¿Qué seguros de salud para los expatriados en Francia?
¿Cómo funciona el sistema de salud en Francia?
En el momento en que trabajen o residan en Francia durante más de 3 meses, los expatriados en Francia tienen acceso al sistema de seguridad social del país, gracias a su Protection universelle maladie (PUMa).
Esta protección permite a los ciudadanos extranjeros residentes en Francia obtener un número de seguridad social y una "Carte Vitale" (tarjeta de seguro médico). Así pues, se les reembolsan los gastos sanitarios. Sin embargo, el sistema sanitario francés generalmente solamente cubre una parte de los gastos ocasionados.
Las consultas de medicina general se reembolsan al 70 %, cuando el médico consultado es el médico que el asegurado ha elegido y declarado a la Seguridad Social. La misma norma se aplica a las consultas con especialistas si el asegurado es remitido a ellos por su médico habitual. Si consultan fuera de esta vía asistencial (parcours de soin), su reembolso se reduce.
Aproximadamente el 80 % de los costes de hospitalización están cubiertos (excluyendo los costes de confort, como las habitaciones individuales).
Los médicos, ya sea en la práctica privada o en el sector hospitalario, pueden cobrar diferentes tarifas, dependiendo de la categoría a la que pertenezcan: Sector 1, Sector 2 o Sector 3. Los médicos de los sectores 2 y 3 cobran honorarios adicionales que no están incluidos en la tasa de reembolso de la Seguridad Social.
¿Cómo elegir un seguro médico privado en Francia: local o internacional?
Dado que la mayoría de los cuidados no están totalmente cubiertos por el sistema de seguro de salud francés, muchos beneficiarios optan por un seguro de salud complementario: éste cubre la totalidad o parte de los gastos no reembolsados por el sistema de seguridad social (ticket modérateur), así como el exceso de gastos, en función de la cobertura contratada. Se trata de una solución que les proporciona mayor tranquilidad, mayor libertad a la hora de elegir médico y mayor comodidad en caso de hospitalización.
Las empresas francesas están obligadas a ofrecer a sus empleados un seguro médico complementario, que deben financiar al menos en un 50 % (a veces incluso cubriendo a las personas dependientes). Sin embargo, esta cobertura suele incluir solamente las prestaciones básicas y puede no ser suficiente. Por ello, algunos trabajadores contratan una segunda póliza de seguro complementaria (una póliza "extra") para tener una cobertura completa.
Para los residentes extranjeros, la elección de una póliza de seguro médico internacional complementaria ofrece muchas ventajas que las pólizas de seguro locales no ofrecen. Por lo tanto, suelen ser soluciones más adecuadas, ya que ofrecen, en particular, la cobertura de la asistencia prestada fuera de Francia.